Las cartas llegan con el viento, las comunicaciones que tienen que llegar, llegaran en el momento, ha hacer lo que deben y de la forma que deben, mientras caminabamos por la calle.
Gracias por el paseo y el derroche de tus colores conmigo. Que lastima que solo
sea por un tiempo. Realmente es rica tu compañía. Me hace crecer, me siento más
libre de lo que soy, y me limpia el alma sucia que traía, por segunda vez pasó!
Una en quito, y esta vez en Santiago! Porque tu presencia me limpia? Porque tu
voz me eleva? Lléname de los colores bellos de tus ojos! Y llévame contigo
hasta las estrellas. Que me cubra el firmamento la piel para levantarme contigo
desnuda del alma, despojada tan liviana como el viento, me convierto en voz de
canto que entra por tu oreja, te habita desde el corazón y sale por el sudor de
tu cuerpo. Que rico es poder habitar mi cuerpo que rosa el tuyo y acariciar tus
pensamientos hasta el sol que aclara el día. Lléname de luz, lléname de
alegría. Seguro que estos colores que se mezclan, más que un óleo perfecto han
transformado mi vida. Que llena estoy! Que rebosante de tus delicias mi dicha.
Solo voy cerrada los ojos hacia donde haya que caminar, porq
si hablo de llegar seguro no quiero, no quiero un fin ni quiero llegar, quiero
caminar y compartir todo lo que haya hoy. Los destellos de la felicidad me han
tocado. No le pongo nombre a esto y eso es lo que hay hoy y no lo dire nunca.
Carolina Toapanta